La realidad real ya no es suficiente. Todos necesitamos alimentar el presente de algo que más que la cruda realidad tangible y cotidiana.
La tecnología ultramoderna de la realidad extendida (XR) se utiliza para hacer más grande la realidad física o crear nuevas realidades virtuales. Cada vez se usa más como estrategia sofisticada de marketing online.
Aunque todavía no sepas a ciencia cierta por dónde van los tiros de la realidad XR, quédate con este dato más que elocuente: las estimaciones indican que la realidad extendida tendrá un volumen de negocio de aquí a tres años vista de más de 300.000 millones de dólares. Huelga decir que la realidad XR ha venido para reinar en las próximas décadas como dueña y señora de la mercadotecnia digital (tiene más usos).
Que supone la realidad extendida
En términos comerciales, la realidad extendida supone para las empresas que lo implementan:
- aumentar la eficacia operativa,
- reducir costes ostensiblemente,
- incrementar el capítulo de ingresos y
- mejorar de modo más que considerable la experiencia del usuario o cliente.
El concepto realidad extendida (XR) incluye la realidad virtual (VR), la realidad aumentada (AR) y la realidad mixta (MR).
Definiciones XR, VR, AR y MR
El concepto global XR significa la fusión del mundo real con el virtual, dicho de otra manera, lo real con lo imaginario.
- Realidad virtual VR. Se refiere a la creación de un nuevo mundo que provoca o suscita sensaciones, emociones o sentimientos también “nuevos o renovados”. Utiliza pantallas HMD y auriculares VR para conseguir resultados 360º cien por cien digitales.
- Realidad aumentada AR. Combina entorno físicos con ambientes virtuales. Puede verse a través de gafas especiales AR, tablets, lentes inteligentes específicas y smartphones.
- Realidad mixta MR. Permite al usuario o cliente interactuar con las nuevas realidades, manipulando libremente tanto elementos virtuales como físicos de la nueva realidad.
Las aplicaciones de la realidad extendida son prácticamente universales: educación, juegos de azar, arte, entretenimiento, publicidad y marketing, ingeniería, sanidad, comercio in situ y electrónico… El etcétera abarca la casi totalidad del mundo mercantil.
Muy a favor de la realidad extendida
- Mejora la experiencia de tus usuarios o potenciales clientes. Por varias razones de peso: llama la atención de tu audiencia o target de forma más original y atractiva, crea conciencia positiva de marca y fomenta la fidelidad de los consumidores hacia un producto o enseña comercial. La realidad XR impacta, hace destacar y sobresalir por encima de la competencia.
- Aumenta el engagement-compromiso e incrementa los ingresos regulares. Una estrategia XR bien definida y estructurada provoca que hasta un 40 por ciento de tus potenciales clientes estén dispuestos a pagar más por tus productos. Eso dicen muchos estudios demoscópicos. Los sondeos y las encuestas realizadas también señalan que seis de cada 10 consumidores consultados prefieren probar un artículo antes de tomar una decisión firme de compra. La realidad XR hace subir como la espuma la participación activa de los potenciales clientes al permitir probar un producto libremente sin presiones directas de carácter publicitario.
- Comprar en zapatillas de andar por casa. La comodidad es otro factor determinante muy favorable a la realidad extendida en cualquiera de sus versiones, aumentada, virtual o mixta. Sentado en el sofá del salón la experiencia de usuario es más placentera y distendida. Las compras son más rápidas. Se eliminan intermediarios molestos y distorsiones ambientales in situ.
- Simulaciones virtuales en tiempo real. La realidad extendida sucede ahora mismo y es manejable de modo intuitivo a capricho del usuario. La experiencia es interactiva, fluida y empática. Un buen diseño XR implica haberse puesto en su fase teórica en la perspectiva del cliente potencial o consumidor-tipo.
- Presentaciones creativas y dinámicas. No hay fronteras que no pueda traspasar la fantasía ni límites que no pueda saltarse la imaginación. Todo es nuevo en la nueva tecnología de las realidades extendidas. Todo está por hacer.
Retos del futuro inmediato
- Privacidad. Con la tecnología XR puede hacerse acopio big data a lo bestia de informaciones confidenciales, ubicaciones geográficas de los internautas y comportamientos personales. El tratamiento y análisis de ese ingente big data permite conocer las preferencias y conductas reales de los consumidores para crear contenidos concretos (publicidad y marketing) que conecten y seduzcan más y mejor a las audiencias. En este sentido, la protección de datos contra ataques y robos indiscriminados de archivos de información altamente sensibles deberá ser asegurada y reforzada de manera más convincente.
- Reducir costes. La realidad extendida es actualmente muy cara. Para invertir en equipos XR hay que pensárselo dos veces y mirar el horizonte a largo plazo para conseguir un retorno sostenido en el tiempo y una rentabilidad paso a paso.
- Licencias en regla. Los contenidos de la realidad extendida pueden ser de precio elevado. Además hay que tener la pertinente licencia de uso comercial por la utilización de imágenes, personajes de ficción, música y otros contenidos especialmente protegidos por derechos de autor.
La razón fundamental para elegir la realidad extendida reside en una mejora más que apreciable de la experiencia interactiva de los usuarios mediante la técnica “siempre probar antes de comprar”, un axioma irrefutable por su propia naturaleza.
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